SHANNON, Irlanda.- La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, que ya contactó a decenas de dirigentes extranjeros luego de la publicación de cables diplomáticos por Wikileaks, confió ayer a los periodistas que la acompañan de regreso a Estados Unidos que deberá continuar con la tarea durante semanas. "Deberé seguir con las entrevistas (sobre este tema) durante las próximas semanas", declaró señalando con una sonrisa que muchos de los 252.000 cables diplomáticos estadounidenses no fueron aún explotados por la prensa.
Clinton también indicó que el presidente Barack Obama dio a su administración recomendaciones sobre los dirigentes a llamar y que el caso Wikileaks también está en la lista de temas que el mandatario tratará en persona con los jefes de Estado y de gobierno.
La jefa de la diplomacia estadounidense se refirió al tema en declaraciones a los periodistas que la acompañan de regreso a Washington tras una gira en Asia Central y Bahrein en la que el tema de las fugas de los telegramas estuvo más que presente.
Clinton estimó que más allá del escándalo provocado, la publicación de los cables permitió mostrar la amplitud del trabajo de análisis y de información del cuerpo diplomático estadounidense. "De cierta forma, esto podría ser tranquilizador, a pesar de las pequeñas frases que se subrayan", dijo.
Apoyo australiano
Por otra parte, desde Sidney, el fiscal general de Australia, Robert McClelland, señaló ayer que las autoridades de su país colaborarán en caso de que el fundador del sitio web, el australiano Julian Assange, sea llevado ante la Justicia.
"Soy consciente de que el fiscal general de Estados Unidos ha dicho que las autoridades de la Justicia estadounidense están analizando en detalles si las leyes de Estados Unidos han sido violadas", dijo McClelland. "Hemos indicado que daremos todo el apoyo necesario a las autoridades judiciales de Estados Unidos", agregó.
La Policía Federal australiana, aseguró, también está estudiando si se han infringido las leyes del país oceánico. Assange es buscado por las autoridades de Suecia por acusaciones de violación. Washington ha amenazado asimismo con llevar al activista ante los tribunales por la filtración de los cables. McClelland no descartó tampoco que se cancele el pasaporte de Assange. Se estima que Assange está oculto en un lugar no especificado en el Reino Unido. (DPA-AFP-NA)